Hace unos años, se introdujo la mediación familiar en nuestro Derecho, permitiendo que las partes implicadas en un divorcio puedan solicitar la suspensión del proceso para someterse a ella. ¿En qué consiste la mediación y cómo se aplica? Nuestros abogados en Sevilla se lo explican.
La mediación familiar ha sido introducida como una nueva causa de suspensión del proceso de divorcio. Se habla de nueva causa porque la posibilidad de solicitar la suspensión de cualquier procedimiento ya se contemplaba antes de la introducción de la mediación en nuestro ordenamiento.
La finalidad de introducir la mediación en las leyes es la de impulsar su utilización, ya que se considera un mecanismo como otro cualquiera para reducir las consecuencias derivadas de la separación y el divorcio, manteniendo la comunicación y el diálogo, garantizando la protección del interés superior de los hijos menores, si los hay. Además, no es la única finalidad posible, puesto que también desempeña un papel importante en la eventual reconciliación de los cónyuges.
No obstante, mediación familiar y reconciliación no son equivalentes, ya que mientras la reconciliación es un resultado, la mediación es una actividad que puede dirigirse a obtener ese resultado, pero también otros distintos. En definitiva, es una manera de aliviar la dureza del proceso del divorcio, para tratar de resolver la situación con el diálogo.